martes, 21 de agosto de 2012

Una dieta balaneada y la prevención de enfermedades





 

Una dieta balanceada y la prevencion de enfermedades causada por la obesidad.


En los últimos años la sociedad y el gobierno se han preocupado por el aumento excesivo de la obesidad y sobre peso en los niños, jóvenes y adultos,  ya que se ha convertido en un serio problema de salud pública. Por eso, es nuestro compromiso profesional y educativo educar para la salud.

 La mayoría de las investigaciones que se han hecho  nacionales e internacionales están preocupadas por los malos hábitos alimenticios de las personas en los últimos años. Esta  afirmación está presente en nuestro ámbito educativo, así como en los medios de comunicación, en la salud pública y en diferentes aéreas encargadas de su investigación. Pero podemos decir que el camino no será nada fácil pero no imposible por prevenir  dicho problema. Al educar a los niños  a que tengan una dieta balanceada  es necesario realizar  estrategias adecuadas a las necesidades de cada uno de ellos, para así poder tomar medidas preventivas o tratamientos oportunos y adecuados a las necesidades de la escuela, el hogar y la comunidad. 

Hablar sobre la obesidad infantil y cómo prevenirlo  oportunamente sería motivo de grandes debates y de puntos de vista muy diversos, por tal motivo en el siguiente proyecto se abordarán algunas recomendaciones y/o sugerencias para tener una buena alimentación balanceada.


¿Qué importancia tiene una dieta balanceada para mantener a nuestro cuerpo en buen estado?

observa el vídeo el plato del bien comer



En el vídeo del  Plato del Buen Comer,  muestra la clarificación de los grupos de alimentos, de como combinarlos  y en que proporción se deben de consumir tomando en cuenta las características y necesidades de los mexicanos.
Los alimentos de cada grupo tienen la misma función, por eso es importante combinarlos y variarlos para asegurar que recibimos la energía y nutrimentos que necesitamos.


Alimentación sana y actividad física.

Durante años, hemos crecido con la idea de que una alimentación balanceada significa “comer de todo”, o “no dejar fuera ninguno de los grupos alimenticios”. Desafortunadamente esto es totalmente falso. Cientos de miles de personas que “comen de todo” están sufriendo infartos cardiacos, diabetes, hipertensión, arteriosclerosis, deficiencia renal y otras muchas enfermedades derivadas de una mala alimentación.
Una alimentación balanceada involucra consumir alimentos que nos den energía, que nos protejan y permitan el crecimiento, regulando las diferentes funciones de nuestro organismo. Para poder llevarlo a cabo es necesario crear un hábito, hace falta proponérselo y llevarlo a la práctica para lograrlo. Es necesario conocer cómo alimentarse en forma sana, ya que sin duda es uno de los puntos primordiales para prolongar la juventud y evitar una vejez prematura.




Una buena alimentación durante la niñez y la adolescencia nos va a permitir disfrutar de la juventud y la adultez sanos y fuertes.
Buenas conductas alimentarias y la selección de alimentos nutritivas son el puntapié inicial para lograr esto. Claro está que eso mismo hábitos deben de ser utilizados por los mayores de la familia, para que el niño las pueda adoptar de manera natural y diaria.
Esto es lo que puedes hacer para asegurarles un futuro saludable:
Sé un ejemplo.
A los niños les encanta imitar, así que si te alimentas bien y realizas actividades físicas es más probable que ellos también lo hagan. Ten una actitud positiva y demuéstrales que los hábitos saludables, tales como probar alimentos nuevos y dar una caminata diaria son entretenidos y te hacen sentir bien.
Sácale provecho a la hora de comida.
Cuando se come en familia, los niños tienden a comer más frutas y verduras, fibra, calcio, hierro, vitaminas C y E y varias vitaminas B; además, consumen menos gaseosas, comidas fritas, grasas  y saturadas. ¿No tienes tiempo para cenas de entre semana? Traten de desayunar todos juntos los fines de semana.
Respeta las señales que te dan tus niños.
Hay  que  asegurar que haya una variedad de alimentos nutritivos para las comidas y los refrigerios. La tarea de tu niño es decidir qué y cuánto comer. Cuando dejas que los niños escuchen las señales de su propio cuerpo—en vez de exigirles que dejen el plato limpio—es más probable que coman porciones de tamaño razonable.
Una lección sobre golosinas.
De vez en cuando, los niños pueden comer golosinas, tales como galletas, dulces y gaseosas en cantidades pequeñas. Los paquetes de 100 calorías NABISCO 100 CALORIAS  PACKS ofrecen porciones razonables para que los niños (y también los adultos) se den un gusto).
Fomenta una imagen corporal positiva.
A los preadolescentes y adolescentes a menudo les preocupa el tamaño o la forma de su cuerpo. Puedes fomentar una imagen corporal positiva, explicándole a  los  niños que cada cuerpo es único y que no hay tallas ni formas perfectas.


Frecuencia de consumo de los distintos alimentos.

En ocasiones puedes tomar, bollos, dulces, refrescos, “chucherías”, patatas fritas y similares. Contienen una alta concentración energética (ácidos grasos saturados, azúcares y sal) y son poco nutritivos.

Varias veces a la semana, aunque no todos los días, se pueden tomar, pescados blancos y azules, legumbres, huevos, carnes, embutidos, frutos secos. También puedes combinarlos.

Todos los días, come, frutas, verduras, hortalizas, cereales, productos lácteos, pan y aceite de oliva. El arroz y la pasta pueden alternarse. Las frutas, verduras y hortalizas, son ricas en vitaminas, minerales y fibras. Se recomiendan 5 raciones al día, por ejemplo 3 piezas de fruta y dos raciones de verdura.

Además de esto…

Desayuna. Para que podamos afrontar con energía las tareas diarias (trabajo, actividad escolar, ocio, etc.), es necesario que empecemos el día desayunando. Se aconseja dedicar el tiempo suficiente a esta comida y que se componga de lácteos, pan o cereales y fruta.

Bebe agua. Es la bebida que mejor calmará tu sed. Deben beberse entre 1 y 2 litros diarios.

No abuses de la sal ni de los productos salados. Habitualmente la tomamos en más cantidad de la recomendable (no más de 5 gramos al día). Puedes sustituirla por hierbas aromáticas, apio, vinagre o especias.
No abuses de la “comida rápida y los alimentos precocinados, son ricos en calorías, grasas, azúcar, sal, consúmelos con moderación.     

                                                 


¿Por qué es importante la actividad física?

La actividad física es importante para la buena salud por lo  tanto, realizar ejercicio de forma regular nos mantiene en buena forma  y evitamos enfermedades. Está demostrado que el sedentarismo es un factor de riesgo para el desarrollo de numerosas enfermedades crónicas, entre las que destacan las cardiovasculares por representar una de las principales causas de muerte en el mundo.




Por otro lado, el llevar una vida activa es muy saludable, y produce numerosos beneficios tanto físicos como psicológicos: existe una relación directa entre la actividad física y la esperanza de vida, de forma que las poblaciones físicamente activas suelen vivir más que las inactivas. También es una realidad que las personas sedentarias que inician un programa de ejercicio físico tienen la sensación subjetiva de encontrarse mejor que antes, tanto desde el punto de vista físico como mental, es decir, tienen mejor calidad de vida.
La actividad física también ayuda a:

Ø  Mantener el peso.

Ø  Reducir la presión arterial alta.

Ø  Reducir el riesgo de diabetes tipo 2, ataque cardiaco, accidente cerebro vascular y varios tipos de cáncer.

Ø  Reducir el dolor de la artritis y la discapacidad asociada con esta afección.

Ø  Reducir el riesgo de osteoporosis y las caídas.
Ø  Reducir los síntomas de depresión y ansiedad.

ENFERMEDADES  CAUSADAS POR EL SOBRE PESO Y LA OBESIDAD


No tener una alimentación correcta con lleva al desarrollo de enfermedades como la diabetes mellitus, hipertensión problemas del corazón , entre otras cosas. Además representa costos económicos elevados para la familia y la sociedad .



RECOMENDACIONES PARA EVITAR
 ENFERMEDADES POR LA OBESIDAD


*Reducir consumo de embutidos,  prod. de  panadería,  refrescos, chocolate, galletitas y snacks.
*Preferir vegetales   frutas, legumbres y pescados.
*Dar variabilidad a las preparaciones.

*Evitar salsas o aderezos grasos.
*Elegir carnes magras quitando la grasa visible-
*Moderar  tamaño de porciones evitando repetir  plato.
* Ingiere muchas agua.
*No abusar del uso de azúcar, sal y aceite.
*Limitar consumo de frituras y empanados.
*Realizar  4 o 5 comidas por día.
*No comer entre horas.

*Acumula  30 minutos actividad física al día-